El poeta y escritor británico Robert Graves se trasladó a Mallorca en 1929. Se instaló en Deiá donde posteriormente construyó una casa llamada Can Alluny. Sin embargo, tuvo que abandonar la isla al estallar la Guerra Civil Española en 1936 y no pudo regresar a Mallorca hasta después del final de la Segunda Guerra Mundial, casi una década después. Regresó en mayo de 1946 con su nueva familia e hizo de Can Alluny su hogar permanente hasta su muerte en 1985.
La casa fue adquirida por la Fundación en 2005 y convertida en museo, abierto al público durante todo el año, cinco días a la semana. Se ha adaptado para albergar una exposición especial y el jardín ha sido restaurado a su diseño de los años 30. La casa se encuentra a sólo unos minutos a pie del centro de Deiá por la carretera de Sóller.